domingo, 25 de diciembre de 2011

Premio de mi hermaniita

Gracias hermana por el premio, sorry por no publicarlo antes es que no había visto los comentarios... mil gracias.


Reglas: mencionar 7 cosas que te gusten 

1- La música
2- La películas emotivas, si mas me hacen llorar mejor.
3- La historias de misterio
4- Dibujar.
5- Cantar aunque no lo hago nada bien.
6- Los animales mayormente los gatos
7- Amo los dulces, ácidos o chocolates.


martes, 20 de diciembre de 2011

Premio para mis seguidores

Este premio es para mis seguidores, cada uno de ellos
Por que no tengo como agradecerles la molestia que hacen por pasarse por mi blog


Mil gracias a todos

domingo, 18 de diciembre de 2011

Obligados a matar

Narrado por Azul.

Después del viaje Susan se despide dando las gracias. Me siento perfecta.

Christofer se veía muy cansado -Chris ¿que tal si vas a descansar?


-No, Azul no es necesario- Dijo con una sonrisa de medio lado mientras agitaba mi cabello.

-Dale cachorro- Interrumpió Gabriel -Ademas no creo que después de lo que le hiciste a Johnny quiera acercarse, igual cuidare de Azul amigo-  Dijo apoyándose del hombro de Chris.

-¿Estarás bien Azul?- Pregunto Chris tomando mis manos.

-Perfectamente-Dije con una gran sonrisa, el me abrazo y se retiro lo seguí con la mirada hasta que me fue imposible continuar.

-Bueno- Susurro Gabriel, lo mire extrañada -¿Tienes un vestido?-

-Si, tengo uno azul que Chris me compro- Susurre confundida.

-Úsalo, vamos a una fiesta- Dijo alejándose de mi, aun estaba en shock pues fue mas una orden que una simple información.

Sin embargo me puse el vestido y me quede esperándolo en el mismo lugar que me había dejado abandonada, de la nada aparece a mi lado.

-Lista?- Pregunto.

-Si, eso creo-Dije con una sonrisa falsa.

-Bueno vamos- Tomo mi mano lentamente.

Caminamos hasta una discoteca, me asuste ya que no tengo la edad para entrar pero no paso nada solo entramos.

Esta la música a todo lo que da y había mucha gente que no podíamos caminar, Gabriel me llevo hasta el centro del lugar y comenzamos a bailar al ritmo de la música electro, pero cambio a un estilo mas lento y romántico y Gabriel se aleja lentamente de mi.

-¿Quieres algo para tomar?- Pregunta a gritos.

-No, quiero bailar- Aclare, el se acerca de nuevo a mi.

Puse mis manos alrededor de su cuello y el en mi cintura.

-Es algo incomodo- Susurro a mi oído

-¿Por que?- Dije de la misma manera. Note que el comenzó a mirar hacia atrás preocupado -¿Sucede algo?-

-Si, sucede que hay cierto hombre al que le debo algo y debo matarlo-  Dijo con una sonrisa.

-¿Por que no le pagas?- Pregunte.

-Pagar?- Dijo entre carcajadas -Ya nadie usa eso- Aclaro.

-Bueno, yo puedo matarlo- Dije con una mirada tierna, el gesto que hizo fue de confusión y asustado.

-No voy hacer yo quien te meta en esas cosas-Dijo soltándome.

-Yo quiero hacerlo- Insistí hasta que el acepto dejarme hacerlo, me dijo quien era  y me llevo hacia el.

-Seducelo y cuando ya estén a solas puedes matarlo, igual estaré cerca si algo sale mal- Susurro y me soltó.

Camine hacia el extraño, estaba algo asustada pero tenia que aprender.

-Hola cariño- Dije lentamente acercándome a el -Cual es tu nombre?

-Hola lindura- Dijo mirando todo mi cuerpo de arriba a abajo -Me llamo Erick

-Erick, lindo nombre- Toque su hombro y me senté a su lado -Aquí no te escucho bien Erick que tal si vamos a un lugar mas cómodo para hablar- Me levante nuevamente y toque su mano.

Me llevo a una habitación, me sentí incomoda al máximo pero seguí con el juego, tranque la puerta y rompí la llave para que no intentara escapar.

Me acerque y saque mis garras y el comenzó a asustarse.

-¿Que es eso?- Dijo en casi un susurro dando un paso atrás.

-¿Que? estas uñas?- Pregunte bromeando y riendo -No te gustan, son fuertes y afiladas- me acerque lo suficiente y lo mantuve en una esquina.

-Puedes hacerte daño con eso- Susurro con una sonrisa, mis ojos se enrojecieron.

-Tienes miedo ?- Pregunte rosando mis uñas en su piel -Por que deberías-

-¿Que quieres de mi, te daré dinero- Dijo desesperado.

-El dinero lo puedo tomar luego, ahora voy a cortarte- Dije con una sonrisa de medio lado, y con mis garras rasguñe su rostro y rápidamente con la otra mano corte su garganta, lo solté y corre hasta la puerta la cual golpee con un costado de mi cuerpo para romperla y después salí.

Gabriel estaba junto a la puerta y me detuvo con su mano.

-Le costaste la garganta?- Pregunto asombrado, asentí con la cabeza -Jamas hagas eso cuando estas afuera o lejos de casa, pueden atraparte-

El comenzó a lamer mi rostro empapado en sangre, me pareció asqueroso pero su lengua estaba seca así que no se sentía nada asqueroso.

-Ya hermosa como antes, aunque el vestido esta arruinado- Susurro mirando el vestido con atención.

-Eso no importa, volvamos a casa antes de que se den cuenta- Dije tomando su mano y el corrió hasta el Cafe, llegamos en menos de un minuto.

-Estas bien?- pregunto soltando mi mano.

-Estoy bien - Aclare ya harta de la misma pregunta cada 5 minutos.

-Christofer me va a matar- Decía continuamente.

-No lo ara, no lo dejare hacerlo- Susurre tocando su espalda para relajarlo.

-Tu crees que lo detengas, ni siquiera unas cadenas irrompibles-

-Yo decidí hacerlo, yo soy la culpable- Dije ya molesta.

Entre al apartamento de Chris, fui hasta su habitación donde el se encontraba tirado en la cama profundamente dormido.

Me despedí con un beso en la mejilla, pero sin querer lo desperté.

-Llegaste rápido- Dijo con la voz ronca tomando mi mano, me acosté a su lado.

-Claro estaba con Gabriel-Susurre -Como puedes hacerlo?

-Hacer que Azulita?- Pregunto acariciando mi cabello.


-Matar- Susurre lentamente -Lo haces siempre ¿Por que? no parece necesario-


-No lo parecerá pero si lo es-Dijo mientras se acomodaba para hablar mejor.


-Matar personas es tan necesario?- Dije exaltada y un poco confundida.


-Dime si no hubiesen leones habría una sobre-población de gacelas - Dijo con la mirada abajo, parecía triste.


 -Que quieres decir?- Pregunte.


-Estamos para algo, no sabemos quien no creo pero fuimos hechos para mantener el planeta libre de personas molestas y malas- Susurro Chirs levantándose de la cama -No puede aumentar de mas de 7.000.000.000 o es posible que nos exterminen-


-Exterminar?- Dije asustada por la palabra


-Si, ellos tienen control total en nosotros y mas en mi, soy el primero y único licantropo que hicieron, por eso me pareció extraño ver a Susan- Dijo mientras se abotonaba su camisa.


Chris salio y me dejo sola en la habitación pensando en lo que dijo, como era posible por que somos obligados a matar aunque no queramos.

martes, 13 de diciembre de 2011

Premio para mi Hermanito


Para mi hermano y su blog, que me parece algo infantil para su edad pero igual me gusta mucho como lo escribe, Digimon Parasite


Mikael escribe el link de mi blog y mándalo a tus blogs amigos


Pregunta:
1 ¿Que demonios te inspiro a crear ese blog?
2 ¿cual es tu mayor sueño?
3 ¿de verdad te quieres ir? 
4¿nos abandonaras? 
5¿Como vas a comer? 
6¿Donde vas a vivir hermano?
7 ¿estudiaras barrendero nuclear o burrologia y letra?


La otras preguntas te las digo en persona!! 



lunes, 12 de diciembre de 2011

Seductora loba

Ahora solo quería estar con Azul así que me senté a su lado, de distraía tocando los lobos y viéndolos pelear.


-¿Por que todos son así?- Susurro ella aun mirando al frente, debe ser que estaba molesta conmigo.


-Por que somos animales y así se comportan ellos- Dije observando su mano que estaba sola apoyada en el suelo.


-Hace poco descubrí que era un animal- Susurro bajando su cabeza y dirigiéndola hacia mi- Y me e designado a ser como era antes de saberlo, no pienso comportarme como una bestia- Dijo levantándose del suelo para apoyarse de la pared. No tenia palabras -Cuando te conocí no parecías un perro- Susurro mirando los lobos pelear, en ese momento salio Gabriel de la cabaña con una gran espada sobre su espalda.


-He escuchado todo, me párese insólito- Dijo girando el cuerpo para vernos menos -Si puedo dar mi opinión creo que nadie puede ocultar lo que es y tu no pensabas en hacerlo linda- Susurro acercándose a Azul y tomando su mano.


-Tu no sabes nada de mi vampiro- Susurro ella alejando su mano.


-Primero mi nombre es Gabriel y se todo de ti- Sonrió dejando caer la espada -Cuando estabas en Transilvania querías parecer normal por que sabias que no lo eras pero, tampoco querías actuar como alguien que no eres- Miro tiernamente a Azul y dio media vuelta para  irse.


-Mataste a tus amigos, a todos- Susurro bajando la cabeza.


-Lo hice para protegerte, yo haría todo por ti - Dije levantándome del suelo y caminando hacia adelante para tenerla de frente -Pero ya con mi reputación faltara poco para que me maten y todos querrán hacerlo contigo también ya que tu causaste todo ese masacre. Por eso quiero prepararte para pelear con cualquiera que quiera hacerte daño y si necesitas ayuda creo que basta en confiar en un vampiro- Susurre y mire a Gabriel quien jugaba con los lobos corriendo y saltando.


Azul se acerco a mi tomando mi rostro con su mano dirigiéndola hacia ella y rápidamente me beso apasionadamente como yo lo hacia, sentí que ya todo había acabado aunque faltaba regresar a New York.


-Chicos, ¿no creen que ya hace mucho frió aquí?- Grita Gabriel.


-Es cierto- Abrace a Azul y camine rápidamente hacia Gabriel -¿Como regresamos?


-No estoy seguro, pero lleguemos a un lugar mas caliente- Dijo pensativo -Lleguemos a Washington-


-Esta bien- Me transforme en licantropo y Azul se puso a mi lado.


-¿Como vamos a llegar?-Pregunto ella muy curiosa.


-Corriendo Azul- Dijo Gabriel con una gran sonría y Azul hizo un gesto extraño -Le pones tu el collar?- Pregunto pasando mi collar.


Ella lo tomo, se puso al frente de mi y me engancho el collar al cuello y comenzamos el viaje, algo lento pero cuando calentamos mas el cuerpo fuimos un poco mas rápido, en el camino algo me atrajo la atención y me detuve. Hice que Gabriel se cayera  pero no le di importancia.


Era un animal grande corriendo por el lugar congelado.


-Estas loco Christofer- Grita Gabriel caminando hacia mi, le señale hacia la extraña criatura -Veré que es- susurro.


-Christofer es solo un animal asustado- Dijo Azul acercándose y acariciándome, me transforme en humano y tome a Azul de la cintura.


Vi que Gabriel se acercaba con alguien, era una chica por su largo cabello y su forma de caminar. 


-Chicos, ella es Wilk- Grito Gabriel a lo lejos, cuando se acercaron ella se presento.


-Lindo nombre, que significa- Pregunto Azul con una sonrisa.


-Significa lobo, pero pueden llamarme Susan - Susurro con una mirada tierna y se dirigió a mi -Tu eres?


-Me llamo Christofer- Dije mirando fijamente sus ojos que me tenían hipnotizados, algo no estaba bien en ella.


-Hermoso nombre- Susurro acariciando mi mano.


-¿Que haces aquí?-Pregunto Gabriel.


-Estoy perdida- Susurro lentamente.


-Es mejor que te vayas- Dije alejándome de ella.


-Crees que no se que son, no les tengo miedo ¿podrian llevarme a New York?- Pregunto dando vueltas a mi alrededor.


-¿Vas a NY?- Pregunto Azul preocupada.


-Si, soy como ustedes-  Dijo parando de girar, Susan me parecía extraña, a pesar que olía a perro su mirada era malvada -Pensabas que eras el único amor?- 


-Bueno, vamos a apurarnos debemos estar antes del anochecer en Montana- Dijo Gabriel preparándose para correr.


Me transforme me quede aun lado de Azul y mire directamente hacia adelante, de reojo logre ver que Susan se acercaba y al llegar aun lado de donde estaba tenia la forma completa de un licantropo. Vi a Azul quien tenia la mirada fija en ella.


-No lo puedo creer- susurro Azul tomando mi cadena con fuerza para llamar mi atención -Es como tu Chris-


Me sentí mal, ya que recordé algunas cosas que habia leído de las chicas así, que eran tramposas y tenían un gran poder de seduccion pero jamas me dejaría seducir por ella. Amo a Azul.


Al llegar a montana nos quedamos en una montaña que mirada hacia un gran lago, había una cueva.


-Azul, Gabriel entren a la cueva yo me quedare afuera para vigilar que no venga un animal extraño- Dije acostándome en una roca frente a la cueva.


Me transforme y me quede viendo la luna. -Buenas noches- Susurro Azul a mi oreja y entro a la cueva con Gabriel que ya estaba dormido.


Cerca se acostó Susan y comenzó a temblar, me acerque, de seguro nos entendíamos a pesar de que no podía hablar podíamos comunicarnos.


-Por que no entras a la cueva? hace mas calor allá- Dije mirando sus ojos color amarillo.


-Aprendí que los perros duermen afuera- Bromeo.


-Me pondré a tu lado un rato así tendrás calor- Susurre acostándome a su lado.


-Gracias- Dijo acomodándose entre mis patas, se estaba poniendo muy cómoda para el tiempo que iba a estar aquí.


Intente mantenerme despierto pero era imposible, no había dormido en días y estaba muy cansado.


Pensé que Azul se enfadaría al despertar y ver a Susan recostada a un costado mientras yo la abrazaba con mi pata, pero cuando despertó no me dijo nada.


en esa mañana antes de partir hable con ella un rato a solas.


-Azul, no me parece buena idea que Susan venga con nosotros- Dije tomándola de la mano.


-No estoy celosa si eso piensas- Susurro - Es de tu misma especie creo que deberían conocerse mejor- Dijo soltando mi mano


-Pero no quiero, no quiero conocerla, quiero que se vaya- Grite tomándola de nuevo.


-Creo que de tanto matar te has vuelto psicótico- Dijo mas fuerte soltándose de mis manos y caminado hacia Gabriel  y Susan para saludarlos.


Algo estaba mal, Susan me mirada de una forma diferente y parecía que esa forma en la que Azul me estaba hablando era causado por ella. Esto estaba mal pero igual continuamos el viaje hasta llegar a Ohio donde comimos algo y descansamos  en un hotel, al mas era mas cómodo que en las rocas.

domingo, 11 de diciembre de 2011

En busca de Azul

Comenzamos el viaje a las 10:30 am fue lento el viaje por mi culpa. Descansamos en Chicago eran ya las 3: 30 de la tarde, nos quedamos en unas montañas.


Gabriel se sentó bajo un arbol tapándose del fuerte calor del sol -¿Amigo te quedaras así siempre?- Pregunto mirándome con una sonrisa mientras que con sus manos jugaba con el verde pasto.

No respondí, obvio ahora era un lobo y no pensaba en transformarme.

-Mejor así brother, eres molesto después de un rato- Dijo acostándose sobre la grama húmeda -Hace frió ¿no lo crees?- Pregunto, al parecer quería socializar un poco -Bueno no me hables, ¿Puedes ladrar?- Se levanto curioso con una sonrisa, le devolví la sonrisa y negué con la cabeza.

-¿No tienes lengua? solo sabes gruñir?- Ya me tenia harto con tantas preguntas así que volví a mi forma normal.

-No, no y no - Grite, estaba que explotaba de estres y preocupación

-Dices que no tienes lengua?- Dijo riendo, solo quería pelear un poco.


-Si, digo ¡No! - Balbucee, me apoye en el árbol y el comienza a reírse a carcajadas -Gabriel, estoy preocupado no quiero bromas- Dije en casi un susurro, mis ojos de seguro se aclararon algo que no me gusta ya que demuestra la pequeña parte de temor que siento.

-El cachorro necesita relajarse, tal vez si te quedaras aquí y yo voy por...- Interrumpí rápidamente a Gabriel caminado hacia el y tomándolo de los hombros.

-Jamas digas eso iré contigo aunque nos retrasemos- Dije soltándolo aunque quería clavar mis garras en el.

-Sabes que cometes un error- Susurro serio y pensativo -¿Sabes que es posible que ya no estén allí? - Grito con todo su aliento -Quiero ir rápido allí, así conseguir aun esa onda de calor que se forma al tele transportarse y así saber a donde fueron, ahora pueden estar en cualquier lado y estamos perdiendo el maldito viaje- Aclaro entre gritos y patadas.

No sabia que pensar, era cierto lo que decía soy muy lento para llegar a Alaska, pero no quería que pasara lo mismo que paso con Marcus.

-No te haría esa maldad amigo, jamas lo haría no soy así no quiero que me veas como esos intentos de vampiros que están aquí- Susurro acercándose a mi, mire sus ojos, decía la verdad.

-Déjame a mitad de camino, llegare- Dije estrechando mi mano hacia el.

-Claro cachorro- Acepto y tomo mi mano -¿Quieres que tenga a Johnny?

-Claro, has lo posible para que no vaya- Dije mientras me transformaba, intente hacerlo lo mas lento posible -Y a Azul, cuídala mucho-

-Azul, la cuidare como a mi vida hermano-  Acaricio mi pelaje y tomo mis orejas -¿Que shampoo usas?- Pregunto mientras tocaba todo mi pelaje, prácticamente me abrazaba. Le mostré mis dientes y hice una señal de que siguiéramos.

-Ha claro, claro casi lo olvidaba. Pero no tienes hambre?-Me miro tiernamente, pero yo comencé a caminar para que dejara de hablar -Bueno, a correr!- Grito y fue a toda velocidad yo tenia que saltar para logar seguir su paso.

Di como 17 saltos hasta llegar a Montana, me dejo en lo mas alto de una montaña.

-Este es la mitad del camino, te veo en Alaska- Dijo soltándome de la correa y preparándose nuevamente para correr -Es horrible separare de tu mascota y dejarla abandonada con frió y hambre-

-Me quede mirando como el polvo se levantaba cuando pasaba a gran velocidad,  ahora era el momento de ir solo. Corrí por todas las montañas, rodeándolas lo cual hizo mas largo el camino, cuando comenzó a caer la noche y el frió era aun mas, me coste sobre una roca esperando dormir al menos un poco no mas ya que podía perder el rastro que dejaría Gabriel para mi.

Cuando estaba a punto de quedarme dormido escuche unos aullidos de lobo, me entro unaa nostalgia espantosa, era horrible ser el ultimo licantropo , estar solo. Tal solo me quedaba Azul y habían mas probabilidades de perderle para siempre a que estuviese conmigo nuevamente.

Me senté en la oscuridad mirando la luna y seguí los llamados que hacia los lobos, aullé hasta escuchar que habían atrapado algo de comida, corrí hacia donde estaban y era una gran manada.

Me acerque sigilosamente esperando a que el líder de la manada me aceptara para comer allí, de igual manera si no me aceptaba soy mas grande así que podría casarlos, pero no quería agotar mis fuerzas.

El líder me acepta y lentamente camine en cuatro patas para aparentar  un poco la forma de un lobo, muchos de estos me intentaron morder pero eran solo unos rasguños, comí y me aleje de allí pero note que estos lobos comenzaron a seguirme.

Intente lo posible de ahuyentarlos pero no logre nada, sea lo que sea jamas lograrían seguir mi paso.

Al fin llegue a Yukon, faltaba poco pero estos perros no se alejaban de mi, cuando entre al frió de Alaska sentí una presión fuerte en mi cuerpo. Vi una pequeña cabaña al frente y allí entre ya que sentí que Gabriel estaba alli.

Al apenas asomarme  Azul empuja la puerta de la cabaña cayendo frente a mi, la mire con alegría, estaba bien. Pero gritaba y lloraba.

-Christofer que bien que estas aquí- Dijo entre llanto, volví a ser humano.

-Que sucede Azul?- Dije acelerado.

-Es horrible, el vampiro que estaba contigo hace lo posible que Johnny no se vaya y lo esta hiriendo mucho- Dijo tocando su ropa llena de sangre -Esta sufriendo mucho es horrible-

Entre junto a mis lobos, ella se asusto aun mas al ver alrededor de diez lobos atrás de mi.

-Lo mataras verdad?- Pregunto en shock mirando a la cantidad enorme de lobos.

No le conteste y solo seguí, al frente estaba Gabriel disparandole a Johnny cada vez que despertaba y se levantaba del suelo.

-Gabriel, traumatizaste de por vida a Azul- Dije muy sorprendido por lo que hacia.

-Era la única forma Christofer- Dijo mirándome con una sonrisa de medio lado mostrando su colmillo  y volvió a disparar.

-Déjalo!- Grite acercándome el me entrego el la pistola.

-Déjame morderlo antes- Dijo y sus ojos cambiaron de color - al menos déjame cortarlo-

-No!- Dije, de reojo vi que Johnny se levantaba asi que salte sobre el mientras que en el camino me transformaba.


-Me causaste muchos problemas- Dije, fueron las ultimas palabras que le dije, cuando levante mi pata para arrancarle la cabeza Johnny desaparece.

Por suerte Gabriel fue muy oportuno, sacaba una espada que hacia encontrado y la levanto para mostrármela y se la clavo justo en le pecho.

-Vaya, increíble no puedo creerlo- Dijo sorprendido riendo.

Me acerque y lo mire directamente a los ojos.

-Déjalo ir - Susurre mientars volvia a mi estado normal y me di media vuelta.

-Que? que ocurre no lo mataras?- Dijo confundido Gabriel.

-No, ya es suficiente- Dije con mas fuerza. me acerque de nuevo a Johnny y le advertí - No vuelvas a acercarte a Azul, por que ya no habrá otra oportunidad.

Johnny asiente con la cabeza y desaparece.

-Amigo que paso?- Pregunto Gabriel.

-Gracias Gabriel pero ahora quiero estar con Azul un rato- Susurre golpeando su hombro y volvi afuera donde estaba Azul con los lobos.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Reencuentro fatal

Narrado por Azul

Ha pasado ya un día desde que deje a Johnny, no lo e vuelto a ver desde aquella vez en la que le dispararon, ahora estoy con Marcus me llevo a su casa la cual es muy acogedora y el me regalo un arma dorada.

Es un extraño regalo para la primera cita pero si pienso en que debo defenderme pues es un fantástico regalo.

-Azulita, vamos al café, tienes que ver clases-Dijo mientras se ponía una chaqueta.


-Cuando me dices así una imagen borrosa pasa por mi mente- Susurre pensativa, el se puso nervioso y cambio de tema.

-¿Azul tienes hambre?- Pregunto caminando al refrigerador de su casa.

-Claro, ¿que prepararas?- Dije acercándome a el apoyando mi mano sobre su espalda.

-No tengo idea ¿que tal si compramos algo en el café? - Dijo con una picara sonrisa, asentí con la cabeza y salimos de la casa.

Cuando llegamos al café Marcus tomo mi mano y nos volvimos invisibles, sus manos estaban frías y temblaba.

-¿Por que nos escondemos?- Pregunte muy confundida.

-Shhh!! has silencio- Susurro rosando sus dedos sobre mis labios.

Note que miro directamente a alguien, cuando termine de detallarlo pude notar que era el mismo chico loco que estaba en la habitación del hospital, este estaba aun lado de otro chico cabello rubio, alto, ojos verde agua y usaba una camisa negra y sobre esta una chaqueta larga de tela.

-El maldito esta con un vampiro- Susurro Marcus, no le entendí el por que decía -Azul rápido ven- Me agarro fuerte y me llevo frente a un extraño chico cabello largo y oscuro.

-Amigo- susurro Marcus, el hombre  se asusta obvio cualquiera lo haría -Dime que escuchas de Christofer-

-Marcus, primero ¿donde estas?- Susurro pensando en lo correcto, que estábamos escondiéndonos.

-Eso no importa, ¿dime que hace Christofer con ese vampiro y de que hablan?- Dijo Marcus tomando el hombro del extraño, deduje que este escuchaba a larga distancia.

-Marcus no te gustara de lo que hablan- Susurro preocupado.

-Dime o te juro que morirás primero que yo en las manos de Chirs- Dijo con voz ronca tomando el cuello del hombre con fuerza

-Esta bien, Christofer le pregunta al vampiro si tu estas aquí- Dijo con dificultad ya que aun Marcus tomaba su cuello.

-¿Que responde?- Dijo Marcus, su mano que me tomaba comenzó a sudar frió y temblar.

-El animal te esta buscando con la mirada- susurro observando detalladamente cada movimiento.

-Puede que me este buscando pero que dice, dímelo- Dijo en voz mas alta empujando al hombre contra una pared, al parecer todos aquí estaban enfermos de ira.

-Dijo que si- Marcus lo soltó rápidamente y volvió la miada preocupada hacia donde estaban Christofer y el vampiro.

Ya no estaban allí caminaban hacia nosotros a pesar que no nos veían, Marcus comienza a asustarse y me empuja hacia afuera.

-¿Por que le temes a Christofer?- Susurre curiosa por lo que sucedía.

-No es asunto tuyo- Dijo deteniéndose y poniendo sus manos en mi boca para parar de hablar.

-Si no es asunto mio ¡suéltame!- Grite, Marcus no se preocupo por mi solo me sostuvo con mas fuerza para no zafarme de sus manos.

-No pienses en esas tonterías solo sígueme!- Dijo llevándome a otro lado, sin darnos cuenta ya atras de nosotros estaba Chirstofer.

-Suéltame!- Grite y me zafe de sus manos, un gran error ya que aparecí en los brazos de Christofer, los dos caímos al suelo.

El vampiro comienza a reírse, y estrecho su mano para levantarme, Marcus aparece para acompañarme.

-Te escondías rata- Dijo Chrstofer con una sonrisa de medio lado, levantados del suelo.

-Jamas me escondería de ti, solo protegía a Azul- Dijo caminando hacia el vampiro -Nunca pense verte con una sucia cosa como esta- Dijo escupiendo frente al vampiro, me dio tanta rabia, ademas que solo se protegía a si mismo no tenia que tratar a esa persona así.

-Cosa? hermano no me comprares con estas basura de vampiros de aquí- Dijo mostrando sus colmillos y garras para intimidarlo, que logro ya que Marcus se alejo.

-No quiero peleas Marcus, solo déjame decirle algo a Azulita- Dijo Chris alejando al vampiro. Marcus asiente con la cabeza y Christofer se acerca a mi, tal su mala reputación me asuste demasiado.

-Tus ojos Azul, demuestra lo que esta dentro de ti jamas lo olvides- Susurro tomándome de los hombros, algo en su voz y en lo que dijo me parecía familiar. -¿Azul no te acuerdas de mi ni un poco?- Sus ojos cambiaron de ese fuerte rojo sangre a azul marino.

Algo en el me parecía muy familiar, pero no veía nada en mi mente ademas que esos ojos rojos en la oscuridad acercándose a mi y un fuerte sonido, como un gruñido de perro bravo -¡No! - Susurre y me aleje de el caminando hacia Marcus.

No dio vuelta a verme solo cerro los ojos.

-Te amo Azul- Susurro, logre escucharlo y cerré los ojos.

-Eres un lobo- Susurre y muchas cosas pasaron por mi mente, la mirada de Marcus cambio, tenia tanta ira que podría destrozar todo el lugar.

-Uh recuerdas al pequeño cachorrito- Dije el vampiro riendo.

-Si Azul -Dijo Christofer su mirada se ilumino, todo vino hacia mi, es mi mejor compañero y amigo como pude olvidarle.
Cuando me iba a acercar a el, algo me tomo por la espalda y ta no lo vi mas, llegue a un lugar extraño donde nevaba.

Narrado por Christofer.


-Maldito Johnny- Grite con todas mis fuerzas, todos quedaron boca abierta y mil miradas cayeron sobre mi -Matare a ese idiota de una vez por todas pero antes de que suceda lo mismo - Me detuve y tome por el cuello a Marcus antes de que desapareciera y no pudiese matarlo.


-Amigo no hagas una locura- Dijo entrecortado Marcus buscando aire -Soy tu amigo-


-Yo!- dije riendo -Yo no tengo amigos- Gabriel (el vampiro) se acerca esperando llenarse de sangre.


Saque mis garras y las clave en su cuello el cual desgarre con todas mis fuerzas, Gabriel consiguió lo que quería, separe por completo la cabeza del cuerpo ya que es la unica forma de matar a uno como nosotros.


-Fantástico Christofer, te luciste - Dijo Gabriel abrazándome, algo que me molesto estaba ensuciando mi ropa de sangre de un traidor.


-Gabriel, ¿sabes a donde fueron Johnny y azul?- Pregunte preocupado por Azul.


-Claro, el royo es que espero que no se hayan ido de Alaska, así si los perdimos- Susurro preparándose para correr.


-Tendrás que ser paciente, soy lento- Dije bajando la mirada decepcionado de mi mismo.


-Por eso compre esto- Me mostró una correa de perro, lo mire confundido -Asi iras a mi paso o al menos te arrastrare-


Me transforme en el perro que acepto que soy y Gabriel me puso el collar, me sentí avergonzado como una mascota. Me puse a gemir y gruñir.


-Debi comprar un una cuerda para atarte esa boca- Dijo molesto, lo mire con rabia y le puse la pata en el hombro haciéndolo caer por mi peso.
-Bueno amigo es no largo viaje espero que no me aplastes mas- Susurro levantándose del suelo.


Esperaba conseguir a Azul y matar a Johnny para que me deje en paz, solo me ha ocasionado problemas.


-Me agrada Azul- Susurro Gabriel -Pero no me arriesgare así, no espero quedar como Marcus.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Licantropo contra vampiro

Narrado por Christofer.


Mi furia crecía mas y mas al ver que Marcus no llegaba, salí del café dejando que la lluvia me empapara. A mi lado tropezó  uno de esos animales que no merecían estar siquiera en nuestra guarida, cuando sentí que tan solo roso mi hombro al caer, explote.


-Ten cuidado por donde caminas animal- Grite furioso esperando su respuesta o tal vez un golpe.


-¿Animal yo? solo mírate, estas actuando peor que un perro- Dijo alejándose evitando la muerte

 -Te informo cobarde que soy un perro y actuó como tal- Dije acercándome mas, tanto deseaba golpearlo -Tu eres un vampiro, un ser temido pero creo que eso era antes, ahora todos son unos idiotas deberian exterminarlos, yo comenzare con este- Me acerque mas hasta que lo acorrale y justo cuando iba a golpearlo desapareció de entre mis garras.

-Yo actuó como lo que soy, pero tu actúas como realmente eres- Dijo incitándome a golpearlo -Vamos no eres solo un perro- Dijo con una gran sonrisa, enseguida me prendí en fuego y me transforme esperando arrancarle la cabeza con mis garras.

-Que lindo cachorro- Dijo buscando una piedra la cual lanzo -Ve por el perrito bueno para nada.
Corrí hacia el en mis cuatro patas, y salte sobre las paredes enganchando mis garras en ellas y así lograr ver todo el panorama y tener una visión completa de lo que posiblemente pasaría.
Salte sobre el y abrí mis brazos esperando tomarlos con ellos y así tener mi boca libre para morderlo, pero se  escapo en el acto lo que me desoriento por completo haciéndome caer sobre los charcos que causo la lluvia, rápidamente me levante para no quedar indefenso.

-Christofer, no lograras tocarme- Dijo con esa sonrisa que tanto me repugnaba, volví con todas mis fuerzas correr hacia el pero parecía ser muy rápido  tanto que parecía desaparecer.

El agua no era buena ayuda pero no pensaba rendirme así que volví a levantarme en mis cuatro patas y mire el lugar, imagen sus movimientos sin estar muy seguro de ellos corrí hacia el como la primera vez pero esta iba a se distinta ya que en vez de saltar al frente de el,  fui en dirección opuesta  dando vuelta a la derecha y sin creerlo ya lo tenia contra el suelo con mi pata sobre su pecho aplastando sus pulmones con todo mi peso.
Solo lo mire con rabia  y puse mi hocico en su oreja para que escuchara mi gruñir, sentí rápidamente su miedo, estuve apunto de comerme a esa sucia rata, pero preferí alejarme y volver a mi estado normal.

-Que asco, iba a comerme un vampiro que bajo- Dije limpiando mi boca y escupiendo.

-Vaya que mala reputación tienen aquí los vampiros- Dijo levantadose del suelo mojado sacudiendo su chaqueta.

-¿No eres de aquí?- Pregunte confundido.

-No imbécil- Dijo furioso por todo lo que lo hice pasar.

-¿Como sabes mi nombre?- 

-Todos te temen allá adentro y solo mencionaban tu nombre por eso te rete amigo- Dijo golpeando mi hombro.

-Genial así no se acercan, aunque tu tienes coraje seras el única rata a la que admirare- Dije devolviendole el golpe -Pero que esto no lo sepa nadie-

-Esta bien y por que tan furioso?- Pregunto curioso acercándose mas a mi.

-Por nada, yo soy asi- Dije evitando el tema, sabiendo que había una aprendiz sola iba a ser atacadas por todos y hasta algunos podrían matarla.

-Ocultas algo amigo, pero lo averiguare- Dijo despidiéndose con na mirada y un gesto malvado en la cara.
-Ademas no me vuelvas a llamar amigo- Susurre y con mis garras rompí si chaqueta y aun así no logre hacerle daño.
-Vez cachorro, ni un rasguño- Dijo caminando sin dar vuelta a la cabeza para mirar mi reacción horrorizada.

Por suerte esto me desahogo, deje de pensar en azul por unos minutos pero ahora iré por todo el equipamiento necesario, matare a Johnny y posiblemente a Marcus pero algo debo tener en cuenta, son seres muy especiales, y mi especialidad sin dudas no es la velocidad.

Johnny se transporta en solo un segundo y Marcus desaparece, esto sera una lucha difícil. 


sábado, 26 de noviembre de 2011

Nunca confíes en un asesino

Narrado por Christofer


Es de lo peor tener que ver a Azul recostada en una camilla sin poder hacer nada por ella, su mente ahora estaba en blanco y no podía hacer nada para que se recuperase, saber que después que este mejor de sus heridas ira rápidamente en busca del estúpido de Johnny y me dejara a mi tirado como un trapo sucio. No podría aguantar un segundo mas sin ella, lo que siento por Azul es mas fuerte que mis instintos asesinos, por esto no la mate, siempre quise trabajar solo pero cuando vi a Azul todo fue distinto.


Azul vuelve a despertar y rápidamente seque mis lagrimas y fui hacia ella.


-Tráeme a Johnny- Susurro lentamente.






-Azul, Johnny no esta aquí- Dije acariciando su cabello.


-Entonces vete, quiero estar sola- Dijo mas fuerte y yo rápidamente aleje mi mano.


A su lado apareció Johnny rápidamente para saber como estaba.


-Azul, mírame aquí estoy- Dijo el en un susurro acariciando su mejilla, yo solo podía ver como ese maldito me quitaba a Azul sin poder hacer nada.


-Johnny, que bien al fin alguien que conozco, aquí todos son tan extraños- Dijo Azul desesperada por salir.


-Tranquila yo te sacare de aquí- Comenzó a desatarla y la ayudo a levantar de la camilla, yo obvio también fui a ayudar pero Johnny al verme acercar abrió su boca dejando ver sus grandes colmillos lo cual era una señal de advertencia para no acercarme.


Sabia que era mas fuerte que el pero en medio de nosotros estaba Azul y preferí quedarme tranquilo, cuando salieron de la habitación comencé a destrozar todo lo que había en esta.


Rompí la puerta y corrí hacia afuera del café, en el camino me transforme en licantropo y con todas mis fuerzas me abalance encima de un civil que caminaba por allí y  le arranque la cabeza con mi boca, mucha gente gritaba y corría. No me importaba que me descubrieran y notaran que existen cosas así, mi ira era mayor aunque tuve que alejarme y salte sobre el techo de una casa y volví a mi forma normal, volví la mirada al café y vi salir justos a Azul y ese idiota.


A mi lado apareció Marcus -Pequeño rabioso llenaste de sangre la entrada de café, si llegan los policías querrán revisar


-Somos suficientes para matar a toda la policía- Susurre siguiendo con la mirada a Azul.


-Si, es cierto- Susurro -Pero también con uno solo se logra lo mismo. Solo arrancarle la cabeza a Johnny y todo esto termina- Dijo apareciendo frente a mi para dejar de mirar a Azul.


-No, por que me odiaría, así como esta todo ahora al menos la veré - Dije empujándolo hacia un lado.


-¿Pero que sucede si se va a Transilvania con Johnny?- Susurro moviendo la cabeza de adelante hacia atrás como si escuchara música -Sabes bien que la puede llevar de un lugar a otro.


-Si hago algo para que regrese su memoria- Dije pensativo, el se acerca mas a mi.


-Na, no podrás, no eres tan inteligente- Dijo con una sonrisa.


-No lo seré pero si soy rápido- Dije y al instante me di vuelta e intente golpearlo pero el desapareció.


-No lo suficiente para mi- Alardeo riendo, apareció de nuevo y golpeo mi cabeza.


-Creo que se me ocurrió algo- Dije mirando fijamente al techo en el que estábamos montados.


-Fue por el golpe, hice funcionar tu cerebro- Bromeo


-No, esto es enserio necesito que me ayudes Marcus- Dije emocionado - Síguelos y me dices donde puedan estar-


-Claro yo te ayudo- Dijo Marcus con una sonrisa malvada.


Vi cuando bajo del techo y desapareció, no logre verlo mas hasta que tropezó y cayo sobre unas cajas que estaban a su lado a mitad de camino. No pude evitar reírme.


Baje del techo y fui hasta donde estaba el cadáver olvidado en la entrada del café y lo arrastre hasta adentro de la guarida.


-Traje comida para los animales- Grite para llamar a los vampiros que estaban ahora en el lugar quienes corrieron rápido a morder el cuerpo.


Narrado por Marcus


Seguí a Azul y a Johnny hasta una casa donde entraron, se veía muy seguro de lo que hacia al entrar, aunque yo ya había asechado mas veces a esta familia y de seguro quedarían bastante heridos.


No me importaba mucho la situación de Johnny pero Azul podría quedar peor de lo que ya estaba, una bala directa a la cabeza no la mataría pero si podría causarle una perdida de memoria permanente.


Johnny tomo la mano de Azul y desaparecieron, supongo que entraron a la casa, debí ser mas rápido y tomar a Azul y así trasladarme adentro con ellos, pero ahora tenia que entrar lo mas rápido posible.


 Vi una ventana mal cerrada y camine hacia ella, escuche un disparo y un fuerte grito de mujer así que me apure y rompí la ventana, vi a Johnny tirado en el suelo con todo el pecho lleno de sangre y el tipo que causo eso tenia a mi Azul acorralada, tal vez no recordaba lo que Christofer le había enseñado.


Sabia que se asustaría pero corrí hacia Azul y la abrace haciéndola desaparecer conmigo hasta que la lleve a un lugar seguro. Ella no paraba de gritar.


-Tranquila, tranquila- Grite soltándola y volvimos a ser visibles


-¿Quien eres?- Grito desesperada caminando de un lugar a otro.


-Soy un amigo tuyo, tal vez no me recuerdes pero me conociste en la mañana de este día- Dije intentando tranquilizarla pero hasta yo parecía mas alterado.


-No recuerdo que paso esta mañana- Dijo pensativa quedándose quieta en un solo sitio.


Tenia que inventar algo para que ella desconfiara mas de Johnny -Johnny te llevo a una casa donde le ocurrió lo mismo que ahora pero desapareció y te dejo olvidada y el hombre que lo había atacado te había golpeado en la cabeza por eso no recuerdas nada Azulita- Dije entrecortado pero intente hacerlo lo mas creíble posible y creo que funciono.


-¿quien me consiguió?- Dijo en un susurro mirando el cielo que comenzaba a nublarse.


-Yo! te recogí y lleve al hospital- Mentí pero esto hizo que sus ojos se iluminaran.


-Gracias de verdad, tal vez no me acuerde de ti pero creo que eramos buenos amigos- Dijo abrazándome, le sonreí amablemente y pensé "Todo esta perfecto, no puedo creer que Christofer me aya dejado seguir a Azul pensando que lo ayudaría"


-Johnny hay que buscarlo- Se alejo de mi rápidamente y desesperada corrió hacia la ventana.


-No, espera déjame a mi ir a buscarlo- Dije con una sonrisa pero cuando le di la espalda mi gesto cambio, si el tipo ese la hubiese golpeado mas fuerte fuera mejor.


Entre al lugar y vi a Johnny levantándose del suelo.


-Ojala te hubieses muerto imbécil - Me acerque y lo patee con fuerza hasta que se retorciera de dolor.


-¿Que te pasa Marcus?- Susurro entrecortado.


-No te acerques mas a Azul o te aseguro que te arrancare la cabeza y se la daré a esos animales que llaman vampiros- Lo amenace mientras le tenia tomado del cabello.


Lo solté y me aleje - Ademas pareces un queso- 


-Gracias- Grito - Idiota - Susurro, salí con un aspecto cansado.


-Azul, Johnny ya se fue, lo busque por toda la casa- Dije consolándola con un abrazo.


-Bueno, yo creo que deberíamos irnos- Dijo alejándose de mi.


-¿Quieres que te lleve al Cafe a ver a Johnny?- Pregunte deseando que dijera que no.


-No por ahora no quiero ver a Johnny llévame a otro sitio- Dijo caminando hacia la carretera.


La seguí y caminamos un rato, comenzó a llover y en el camino me encontré a una amiga con su compañero corriendo evitando el agua.


-Epa!! Chicos, vengan- Grite, ellos corrieron hacia nosotros, me quite mi chaqueta de cuero.


-Hola Marcus- Dijo Alejandro.


-Hola Ale- Dije dándole la mano -Hola Noa - Dije guiñándole un ojo y le entregue la chaqueta.


-Gracias Marcus- Dijo Noa con una sonrisa.


-Quienes son?- Susurro Azul a mi oído disimuladamente


-Ah! Que mal educado Ale, Noa ella es Azul- Azul les estrecha la mano.


Al darle la mano a Alejandro este la huele.


-Linda bestia Marcus- Susurro con una sonrisa - ¿Es tu compañera?


-No lo se, no lo creo- Dije pensativo.


-Si, soy su compañera- Dijo y esto me alegro aunque acostumbro trabajar solo siempre me encariño con alguien y muere.


Pero ya había logrado algo, Christofer de seguro mate a Johnny y yo quede con la chica. 

viernes, 18 de noviembre de 2011

Sin recuerdos

A la mañana siguiente Christofer me levanto temprano con un beso en la mejilla.


-Hola- Susurre con la voz ronca -¿Que hora es?




-Temprano- Dijo ayudándome a levantar -Vamos a desayunar.


Tome una ducha y me vestí rápidamente con la falda del colegio y la camisa de Christofer, la cual amarre en mi cintura para que se viera mas femenina.


-Te vez hermosa- Tomo mi mano.


-¿El arma donde esta?- Dije buscándola entre su ropa.


-Hoy sera un desayuno normal. No vamos a robar la comida, vamos a comer y después corremos sin pagar- Bromeo con una sonrisa.


Una pequeña carcajada salio de mi, siempre Chirstofer tan gracioso.


-Eso es robar tonto- Dije golpeando su hombro suavemente.


-Pero no con las mismas palabras y creo que se escucha mejor- Dijo con una picara sonrisa.


-Bueno, como tu digas, las dos cosas me parecen igual de bajas- Dije Caminando hacia la puerta.


-¿Prefieres trabajar?- Grito desesperado, no esperaba una respuesta pero igual no mire con esa cara de pereza.


Salimos y caminamos unos metros hasta un café, estaba un tanto olvidado su ambiente era antiguo y se veía mas bien abandonado.


-¿Aquí es?- Dijo con cara de pocos amigos.


-Si, te sorprenderás de toda la gente que veras aperas de el aspecto del lugar- Abrió la puerta y me hizo pasar, sin mentir el lugar daba asco, estaba muy descuidado ni un solo alma.


-¿Donde están todos?- Pregunte.


-Nuestros compañeros están siempre en el sótano- Dijo caminando en dirección a unas escaleras escondidas bajo una tabla de madera.


-¿Compañeros?- Pregunte al verlo bajar, ni loca bajo allí con ese desquiciado, sera mi amigo pero el me da mucho miedo a veces.


-Ya veras, solo baja conmigo- Estrecho su mano hacia mi, dude pero igualmente la tome y baje con el, se veía todo muy oscuro y de repente las luces se encendieron y vi al rededor  de 50 personas o menos, todos con algo que de verdad asustaba, mientras caminábamos varios me olieron y otros solo me tocaron. Uno de ellos descubrió mi cuello del cabello y se acerco para morderme pero Chris me jalo hacia el con fuerza.


-Cuídate, no todos son amistosos- Dijo dándome un beso en la frente y mirando con rabia a todos para que se alejaran de mi.


Después me solto y se fue a hablar con unos amigos, me quede allí y mire a todos lados, mientras hacia esto logre ver a alguien, cabello oscuro, alto, ojos amarillos. Sin dudas pensé en Johnny al verlo.


Seguí detallando al extraño mientras me acercaba, era Johnny


-¿Johnny?- Dije acercándome a el y viendo sus grandes ojos amarillos.


-Azul, ¿Que haces aquí?-Pregunto preocupado, abrazándome.


-No, no ¿que haces tu aquí?- Me aleje de sus brazos y tome un cuchillo que estaba a mi lado.


-No hagas locuras amor- Susurro lentamente mirando el cuchillo.


-No haré nada si responde mi pregunta- Lo amenace y me acerque mas para intimidarlo.


-Bueno..- Pensó y continuo -Pensaba en buscarte hoy


-Si claro, no vengas con mentiras. ¿Cuanto tiempo tienes aqui?- pregunte en voz alta, furiosa.


-Unos meses- Susurro con la mirada baja.


-¿Como tres meses? si hace cono tres días estabas conmigo en Rumanía- Dije confundida a gritos.


-Para mi es fácil ir de un lugar a otro con rapidez- Susurro -Pero ahora que estas conmigo podemos ser un equipo linda -Dijo con una sonrisa que fue desapareciendo al ver mi rostro enfadado.


Al rato se acerca Christofer.


-Azulita encontré algo que de seguro te gustara- Tenia la mirada abajo pero cuando la volvió hacia arriba vio a Johnny y se fue alejando lentamente.


-No no no, tu vienes para acá cariño- Dije tomando la mano de Chris y trayendolo hacia la conversación -¿Tu Sabias, por eso me hablabas tanto de el?-


-Si Azul, lo siento- Dijo avergonzado.


-Okey ella no te disculpara Chris- Dijo Johnny algo enfurecido -Ella se quedara conmigo, puedes largarte


-¡Silencio!- Grite y los separe estaban apunto de pelear. Di media vuelta y comencé a caminar, ellos quedaron confundidos.


-Chris, muéstrame lo que me ibas a mostrar y volvamos a casa- Dije mostrando mi mano para que la tomara, el corrió hacia mi y me abrazo.


Me llevo a una habitación donde habían muchas armas, donde me mostró unas pistolas muy discretas que podía usar bajo mi ropa, escogí una de muchas y me entrego las balas. Todo lo guarde en una mochila que había agarrado al entrar a la habitación.


-Bueno vamos a comer- Me llevo a una mesa donde me senté mientras el iba por algo para comer.


Me quede mirando a todos lados y de repente siento una respiración en mi oído.


-Hola, soy tu conciencia diciéndote que te busques a un compañero como Marcus- Susurro esa voz ronca pero solo me reí.


Después apareció frente a mi un chico alto, simpático, ojos oscuros, cabello corto lizo y vestía con una chaqueta negra de cuero y una franela blanca abajo de esta, con unos pantalones rotos y unos zapatos deportivos.


-¿Eras quien me hablaba?- Pregunte levantándome para presentarme.


-Si- Dijo sonrojado -Soy Marcus- Dijo estrechando su mano, cuando la iba a tomar desapareció, me sorprendí sin dudas.


-Eres algo tímido- Dije con una sonrisa.


-Por eso me escondo de todos- Dijo apareciendo nuevamente frente a mi - Si necesitas ayuda llámame.


-Ademas soy  Azul- Dije rápidamente por que ya iba a irse.


-Que gusto Azul- Dijo y solo se desapareció.


Me senté nuevamente y Chris llego con una rica pizza que puso sobre la mesa.


-Conociste a Marcus- Dijo con una mirada furiosa.


-Si ¿como lo supiste?- Susurre tomando un pedazo de pizza.


-Lo se todo Azulita, pero no se por que reprobé la escuela- Dijo pensativo.


-Bueno, como sea Chirs ¿haremos después de esto?- Pregunte emocionada.


-Luego lo veras linda- Dijo con una sonrisa



Después de comer salimos y me llevo a un centro comercial.

-¿Por qué aquí?- Pregunte extrañada

-Por que quiero escogerte algo- Corrió a una tienda y se sentó -Eres libre de escoger lo que quieras.

-¿Enserio? - Dije con una sonrisa.

-Claro Azulita - Susurro poniéndose cómodo, tal vez pensaba que duraría mucho.

Vi unos conjuntos espectaculares, pero por ahora solo escogí un vestido color azul rey, estilo clásico corto. Me metí al probador y me lo puse.

-¿Que tal Chris?- Dije saliendo del probador, el se despierta algo confundido.

-¡Vaya! Azul te vez mas que bella- Dijo levantándose rápidamente.

-Gracias, me gusta este- Entre nuevamente al probador a quitármelo y volver a vestirme, al salir se lo di la chica que trabaja allí, pero Chris rápidamente me detuvo.

-Ya pague- Dijo rápidamente tomando el vestido, no quise preguntar así que salí.

-¿Tu no vas a querer nada?-Pregunte algo apenada.

-Un dulce- Dijo sonrojado, entro a una tienda de dulces y yo lo espere afuera, vi que salió con una gran chupeta de caramelo.

-Pareces un bebe con eso Chris- Dije tomando su mano.

-Lo se, pero esto es delicioso- Dijo dándome un pequeño beso en los labios.

Salimos del centro comercial y me llevo a una casa, algo pequeña.

-¿Que haremos aquí?- Dije algo asustada.

-Quiero divertirme un rato- Dijo abriendo la puerta -Pasa Azul

Entre y vi a un señor sentado en un mueble viendo televisión, así que escondí pero Chris paso de largo.

-Hola amigo, tanto tiempo- Golpeo en el hombro al extraño hombre, parecía no conocerlo ya que este se asusto y rápidamente se levanto del mueble.

-¿Que hacen aquí? ¡¡Salgan!!- Grito desesperado, tomando un bat de béisbol.

-Chris, creo que debemos irnos- Dije asomándome solo un poco.

-¿Por que si somos todos amigos- Chris se acerca y el hombre lo golpea con todas sus fuerzas en la pierna izquierda -¡Con un demonio, maldición! acaso no sabes que eso puede romperme una pierna idiota- Obvio me asuste y corrí hacia el y al hacerlo el hombre también me golpeo a mi pero esta vez fue en la cabeza.

Escuchaba muy poco y todo se veía muy borroso, toque mi cabeza y vi mi mano llena de sangre, después me desmalle. 

Desperté en un extraño lugar, vi a través de una ventana mucha gente caminar.

-Azul, Azulita que bien que despertaste estaba muy preocupado, sabia que no te iba a pasar nada pero igual me daba miedo- Dijo alguien extraño, casi que abalanzándose a mi.

-Estás loco, primero ¿dónde estoy? segundo ¿que me paso? y tercero ¿quién demonios eres tú? - Dije muy asustada.

-Okey Azul, estas en New York, un hombre loco te golpeo con un bat de béisbol y por ultimo soy Christofer- Dijo algo confundido, pero volvió a abrazarme.

 -Tengo que irme, mis padres donde están, como puedo estar en New York?- Dije muy confundida moviéndome de la cama donde por alguna razón estaba atada -Por que estoy atada?

-Por que no queríamos que le hicieras daño a alguien, casi siempre que despiertan tienen la rabia que sentían al momento de ser heridos- Susurro muy triste alejándose de mi.

-Quiero irme, sácame de aquí como te llames quiero a Johnny, donde esta?- Intente desatarme, Christofer se sentó nuevamente el la silla donde estaba y baso su cabeza que la escondía tras sus brazos.

Creo que comenzó a llorar, ya que cuando llego alguien a saludar el se levanto y seco su rostro que estaba totalmente enrojecido, esto me hizo sentir mal, pero no lo recuerdo, no recuerdo nada


miércoles, 2 de noviembre de 2011

Primera victima


-¡Vaya! que día- Dijo Chris entrando en una habitación y acostándose en la cama.


-Si, que día mas loco- Lo seguí y me acosté a su lado y tome su mano- ¿Que mas tengo que hacer?.
-Bueno, debes siempre ser distinta, jamas dos veces la misma o te descubrirán- Susurro mientras acariciaba mi cabello- Debes dejar de ser la antigua Azul y vivir en el cambio.

-Como conseguiré tantas cosas ?-Pregunte alegre...

-De lo que encuentres Azul- Dijo volviendo su cuerpo hacia mi y se apoyo en mi pecho.

-Y yo puedo hacer eso que tu haces?- Dije haciendo una pausa y continué- Convertirme en licantropo?.

-No lo creo eso lo tengo solo yo- Dijo con una sonrisa picara muy linda.

-Creído- Dije riendo y me levante de la cama- Dime mas de lo que tengo que hacer.

-Bueno evita asustarte ya que sera muy evidente- Dijo haciéndome caricias en mi rostro.

-Como seria evidente?- Pregunte.

-Tus ojos cambian depende de como te sientas, como cuando te enojaste hoy y me rasguñaste- Dijo tocando su rostro- O cuando te di la pistola y me viste transformar, es fácil notar tu miedo, se aclaran tus ojos.

-Y como hago para dejar de hacerlo?- Dije avergonzada.

-Pues acostumbrarte a ver un poco de sangre- Dijo con una sonrisa- Tienes hambre?.

-Claro- Dije tocándome el abdomen.

-Vamos a comer- Tomo mi mano y me llevo a uno de los apartamientos que quedaban en el 4to piso, nos pusimos en frente de la puerta.

-Azul ten esto, solo tienes una bala no quiero que te hagas daño, da un paso hacia atrás- Me paso un arma.

Se veía tan sexy como sacaba dos armas que tenia en las piernas y con toda su fuerza rompió la puerta con una patada.

Apunto con las dos pistolas y entro lentamente, me hizo una señal de que no entrara y se alejo de tal manera que no pude verlo.

-No! no, por favor- Grita Chris algo que me preocupo -Me desarmaron Azul, escapa!- Vuelve a gritar

Pero no me fui sino que entre con mi arma apuntando al frente, pero no pase del pasillo principal.

-Christofer, estas bien?- Susurre entrecortada, de repente se asoma Chirs con una sonrisa.

-Aff, Chirstofer te odio, me asustaste- Dije en gritos bajando el arma.

-Discúlpame,  era solo una prueba- Dijo mirando a todos lados, de seguro lo estaba inventando -Pasa no hay nadie estos italianos cocinan muy bien pero nunca los veo aqui.

-Y como sabes que cocinan bien?- Dije pasando hacia la cocina.

-En la noche huele exquisito y siempre dejan sus recetas, siempre vengo y cocino sus recetas secretas- Dijo tomando unas fichas que estaban en una mesa.

-Yo voy a vagar por aquí mientras tu me preparas algo rico entonces?- Dije caminando lentamente hasta llegar a una habitación.

-Pruébate la ropa- Grito Chris desde la cocina, fui directo al armario y registre todo.

-Este hombre tiene una esposa sexy- Me dije a mi misma al ver los vestidos tan bellos que habian, muy escotados y de colores brillantes.

-Quiero verte-Grito nuevamente Chris.

-Espera aun no me cambio- Dije tomando un vestido corto rojo corte sirena.

Obviamente me lo probé pero con las botas del colegio no quedaba muy bien pero era lo menos que me importaba, es lindo pero no es para mi. Tome otro conjunto esta vez era un vestido mas juvenil color violeta, perfecto con mis ojos.

Me quede acostada en la cama observando el arma, unos minutos después Chris me llamo para comer.

Sali rápidamente y vi a Chirs vestido de etiqueta, todos los chicos vestidos así son completamente irresistibles.

-Te ves hermosa- Descubrió mi rostro que lo tapaba mi flequillo y tomo mi mano llevándome hasta la mesa, todo se veía delicioso.

-Lo pediste por teléfono verdad?- Dije riendo, no podia creer que lo hubiese hecho el.

-No, lo hice yo sólito, una cosa que aprendiste de mi hoy- Susurro sentándose y tomando un sorbo de vino blanco.

-También descubrí que eres, exagerado, bromista y terco-  Dije con una sonrisa picara mientras tomaba un pedazo de carne que había servido.

Después de un rato charlando, abren la puerta, eran los chefs que vivían aquí. Sin perder un segundo Christofer me pregunta sobre las armas.

-La deje en la habitación- Susurre levantándome de la silla para ir a buscarla, pero el me detuvo.

-No hay tiempo que perder, espera a que cierre la puerta y las buscas- Susurro a mi oído.

Sono la puerta cuando se cerro y Chirs me soltó y corrí a la habitación e busca de las pistolas, escuche un grito de pelea y ya no se escucho mas.

Fui rápidamente hacia allá y vi al pobre hombre arrodillado en el suelo y Chris con su mirada fría directa a el. Sentí miedo y camine lentamente hacia Chris para darle una pistola.

-Relájate- Susurro cuando llegue hacia el, suspire y el temor se fue.

-Bueno, creo que ya descubriste quien te roba la comida- Dijo Chris en voz alta para que el hombre lo escuchara -Pero debiste llegar mas tarde estaba apunto de besar a esta linda chica- Apunto directo a la cabeza del hombre quien cerro los ojos asustado.

-Christofer!- Dije antes de que disparara -Yo te dispare y me dijiste que te dolió, puedes hacerlo conmigo a ver que tal?- Dije poniéndome aun lado del chefs.

-Azul, que cosas se te ocurren?- Dijo frustrado.

-Hazlo!- Dije en voz dominante, me apunto y puso el dedo en el gatillo- Espera! antes que todo, vivire?- Dije apretando mis puños.

-Habría que averiguarlo- Dijo y disparo directo a mi pecho, no recuerdo mas de allí no se que paso, pero de repente vuelvo en  mi  levantándome exaltada, todo se veía borroso y escuche un ultimo disparo y a mi lado cayo muerto el hombre.

-Vaya, despertaste, pensé que no pasaría- Me ayudo a levantarme y me abrazo.

-Eso fue extraño- Dije en casi un susurro, estaba muy mareada.
-Luego te acostumbraras- Dijo tomando mi rosto con sus manos -Donde me quede?- Dijo con una mirada perdida y luego me beso, así tan lindo como el lo hace algo que me dejo aun mas atontada.

-Que haremos con el cuerpo?- Dije mirando el el cuerpo muerto del chef.

-Va hacerle compañía a John- Bromeo y volvió mi mirada con si mano hacia el y volvió a besarme pero esta vez solo fue un beso corto, y tomo mi mano llevándome nuevamente a nuestro apartamento donde me dejo en una habitación y me presto unas camisas de el para dormir.

domingo, 30 de octubre de 2011

Adiós a la inocencia

Entramos juntos al colegio y Chritofer entro a mi clase, algo que me confundió, me soltó y le hizo una seña de que me fuera a sentar.



-Christofer esta no es tu clase, ¿puedes salir?- Dijo el profesor trancando su paso, Chris se acerco y lo miro fijamente a los ojos y susurro algo que no logre oír -Pasa Chris.

El pasa y se sienta a mi lado en la parte de atrás del colegio, comenzó la clase, tome mi cuaderno y empece a apuntar, Christofer pone las manos en mi cuaderno.

-No escribas- Susurro mirando al profesor como si no pasara nada.

-¿Por que?- Dije empujando su mano.

-Las clases me aburren- Dijo en un suspiro -No volvamos, no es necesario el estudio para lo que haremos- Puso su brazo al rededor de mi cuello y agito mi cabello.

-¿Que haremos?-Dije con una cara muy extraña que Chirs cerro los ojos de lo raro que fue.

-Por ahora nada Azul, después te muestro pero esta vez no me golpees- Tomo mi mano y apreto uno de mis dedos, senti algo extraño pero no quise ver -¡Rasguñame!

-¿Que?- La verdad su forma de hablar era muy rara para mi, no entendía ni un poco, el empezaba a fastidiarse.

-Vamonos- Tomo mi mano y se levanto.

-Acaba de empezar la clase- Dije pero el me empujo afuera del asiento y me hizo salir del salo.

-¡Epa no pueden salir así!- Dijo el profesor, intente devolverme pero me detuvo el brazo de Chirs.

No logre ver lo que pasaba pero el gesto que hizo el profesor lo dijo todo, Chirs lo asusto tanto que el retrocedió lo suficiente para darle paso. Cuando Chris dio media vuelta para salir note como sus ojos cambiaban de color Vino a su color normal azul marino.

Yo no pude evitar tampoco asustarme y creo que el lo noto.

-Debes dejar de temer a estas cosas, lo veras mucho y debes dejar de ser tan débil- Susurro  tomándome de la cintura entre su brazo.

Salimos del colegio y me llevo hasta un apartamento en el tercer piso de un edificio.

-¿Aquí vives?- Dije entrando como si nada y revisando las cosas.

-No- Dijo con una sonrisa picara.

-¿Entonces de quien es?- Dije incomoda.

-De un...- Hizo una pausa -De un "amigo".

-¿Donde esta?- Dije muy curiosa, quería conocerlo.

-¿Quieres verlo?- Dijo con una cara sorprendida, asentí con la cabeza -Ven- Tomo mi mano y me llevo a  un armario y lo abrió, donde había una alfombra enrollada, estaba extrañada por lo que me mostró -Azul el es John, John ella es Azul-

-Bromeas verdad?- Dije sonriendo.

-No- Dijo cerio, me aleje del armario y volví hacia donde estaba el.

-Que me ibas a mostrar?- Dije sentándome en una silla que estaba por allí.

-Sígueme- Tomo mi mano y me llevo hasta una ventana.

Me apoyo con fuerza contra la ventana abierta y mi mente solo quedo en los autos que pasaban.

-Que sientes?- Susurro a mi oído

-Miedo- Dije un poco acelerada.

-¡No!- Dijo empujándome aun mas hacia afuera.

-Enserio Christofer, esto me esta asustando- Dije entrecortado

-No sientas miedo, siente rabia enojate por lo que puede que haga- Dijo empujando mi cabeza hacia abajo.

Cerré los ojos y note que Chris me llevaba aun mas hacia afuera y comencé a enojarme y de mis manos salieron unas uñas mas gruesas, fuertes y afiladas que logre clavarlas en la pared.

Chris comenzaba a alejarse y di rápidamente una media vuelta y con toda mi fuerza rasguñe la mejilla de Christofer.

-No esperaba eso- Dijo arrodillándose en el suelo con una mano en su cara.

-Lo siento- Corrí hacia el y lo abrase.

-No te disculpes- Dijo con una linda sonrisa -Como te sentiste?

Me quede pensando y la verdad fue fantástico.

-Genial- Susurre a su oído, el se levanta y toma mi rostro con sus manos y me beso de manera desesperante y apasionada, lo cual fue sexy. Muy distinto a Johnny pero esto estaba mejor.

Se alejo rápidamente y me dejo sola en esa habitación mientras el entraba a otra unos segundos después llega con un par de pistolas, algo que de verdad me asusto.

Me lanzo un arma y claro la tome pero pesaba mucho así que la deje caer.
-Acaso te acostumbraste a tirar mis cosas?- Dijo enfurecido lanzándose al suelo, desesperado tomando el arma como si fuese una copa de cristal -Crees que es fácil conseguir estas hermosuras, consígueme una nueva me la debes, cuando aprendas te buscas la tuya- Me volvió a entregar el arma y me enseño a tomarla.

-¿Que are con esto? - Dije confundida y asustada.

-¿Que se hace con una arma Azul?- Dijo en un suspiro fastidioso -Solo toma el arma de a manera mas cómoda para ti y dispara-

-Estas loco?- Grite

-Solo hazlo- Maximizo la voz y sus ojos comenzaron a llenarse  de sangre pintándolos de rojo, su cuerpo creció y su camiseta se rompió, su boca comenzó a llenarse de dientes. Al ver esto solo cerré los ojos y dispare  dos veces.

Y paro ese sonido horrible que emitía al transformarse, dure unos minutos con los ojos cerrados pensando en que había pasado, después abrí los ojos lentamente y vi a Christofer tirado en el suelo con su camiseta destrozada y tenia dos manchas grandes de sangre en su pecho.

-Dios que hice- Dije mientras las lagrimas salían de mis ojos, me apoye en el  a llorar.

-Eso.. fue... sexy -Susurro Chris entrecortado sin aliento- Aunque me dolió.

-Como es posible?- Dije alejándome de el, estaba como poseído era espantoso.

-Eso es algo que te explicare luego- Dijo levantándose y dándome su arma -Continua practicando.

Me quede atontada pero seria asentí con la cabeza, me levante dando media vuelta y dispare.

sábado, 29 de octubre de 2011

Extraña aparición

-¿Bestia?- Dije confundida, ¿acaso me estaba insultando?

-Te espero afuera al terminar la clase, te explico mejor- Dijo alejándose de mi y entrando en un salón.

Despeje mi mente y camine por el pasillo hasta que vi un cartel que dirigía hasta una oficina, fui hasta allá y entregue unos papeles que mi padre me dio.


-Buenos días- Susurre entregándolos, una chica joven como de unos 30 y algo de años me atendió y me mostró el lugar y donde vería mis clases y me dejo en el salón donde vería matemáticas ya que era la primera clase del horario. El profesor es moreno y gordo, pero muy divertido me hizo pasar y me sentó a un lado de una chica algo nerd pero no me importo y comencé a hablar con ella.

-¿De donde eres?- Pregunto interesada, detalle sus ojos, eran normales pero había una marca extraña de color negro, era una simple linea pero en zic-zac hacia abajo de la cornea.

-¿De Rumania y tu?- Dije lentamente distraída por esa linea extraña en su ojo.

-De aquí pero mis padres vienen de Rumania, que coincidencia- Dijo con una sonrisa en su rostro.

-¿De verdad?- Dije sin animo, pero no quería cortarle la nota tan feo diciéndole que no me importaba. Sonó el timbre y rápidamente salí hasta la puerta del colegio, sabia que aun faltaban clases pero preferí irme con ese extraño, se que suena algo inseguro pero mi curiosidad me llevaba mas hacia el. Lo vi en la puerta y me miro con esa cara de apúrate y sin dudas corrí hacia el, su mirada es muy intimidante y al igual que con la chica nerd detalle sus ojos color azul marino  algo que nunca había visto.

-Explícame ya- Dije apenas comenzamos a caminar.

-Explicar para que?- Susurro -Igual no entenderás mejor te haré un ejemplo- Tomo mi brazo y camino mas rápido.

-Hacia donde vamos?- Dije muy incomoda.

-Ya veras- En una calle dio vuelta a la derecha directo a un callejón oscuro, lo cual me asusto mucho.

-Que hacemos aquí?- Dije intentando soltarme de entre sus manos.

-Siente el miedo- Susurro a mi oído -Saca toda tu rabia, lo que sientes ahora- Comenzó a tocarme lo que me asusto mucho, intente sanarme de el pero sus brazos me tenían atada, logre sacar una mano y lo golpee, el se alejo y se escondió entre las sombras y escuche un sonido como de perro bravo y vi dos puntos rojos que se acercaban mientras que el sonido se hacia mas fuerte, hasta que vi la forma de unos ojos y grandes dientes que goteaban saliva, me quede completamente en shock. Comenzó a acercarse ese extraño animal de casi dos metros de alto, acerco su boca llena de dientes a mi cuello y sentí su aliento y su gruñir de rabia. Solo cerré mis ojos pensando que era el fin   pero de repente solo se alejo y desapareció.

No me quedaría allí como una tonta solo corrí hasta el hotel donde me quedaba, abri la puerta de mi habitación y me tire  en la cama y miles de lagrimas comenzaron a salir de mis ojos.

¿Que paso? ¿Estoy viva? ¿Que era eso? estas y muchas preguntas mas inundaron mi mente.

Me quede pensando en lo que había dicho ese extraño chico "siente el miedo, saca tu rabia" que significaba esto porque ese animal no me ataco, acaso era el y como habrá hecho eso.

Busque mi maleta y saque uno de mis libros de historia donde salían animales mitológicos y cosas así, comencé a ojear las paginas y vi las imágenes y apareció un licantropo con esa mirada furiosa y roja y esa boca repleta de dientes, leí de donde venían cuales eran sus características humanas y eran demasiadas las cuales aun no había detallado en el.

Ya estaba cayendo la noche salí a comprar una hamburguesa con queso y volví al hotel, me tire en la cama a ver televisión mientras pasaban una película de terror, me puse a verla mientras comía mi cena y después de terminarla me quede completamente dormida.

Desperté haciendo lo normal de mi nueva rutina, despertar a las 7:00 am, bañarme, lavarme los dientes, ponerme mi uniforme tomar mi bolso y salir directo al colegio.

A lo lejos veo al chico extraño y me acerque mas lento, el sin siquiera verme camina directo a mi, di media vuelta disimuladamente pero me alcanzo mas rápido de  lo que pensé y tomo mi brazo.

-¿Acaso se te hizo una costumbre tomarme así?- Dije con una mirada de odio.

-Así te controlo si es necesario- Dijo con una sonrisa de medio lado -Disculpa haber sacado el lado malo de mi ayer.

-¿Ese es el malo?- Dije ocultando el miedo que sentía al tenerlo a mi lado.

-No tienes que hacerlo Azul- Dijo tomando mi rostro rústicamente y volviéndola hacia el -Ademas soy Christofer, no quiero que me sigas llamando extraño.

-¿Como sabes que lo hago?- Dije intrigada.

-Te escucho siempre Azul- Dijo sonriendo -Tu Johnny ya no piensa mas en ti.

Con toda mi fuerza me solté de sus manos.

-No vuelvas a hablar así de el- Dije enfurecida.

-Deja de estar triste, jamas te dejare- Susurro riendo a carcajadas

No dije mas, solo mire hacia abajo, su risa me tenia harta volví mi mirada hacia su rostro.

-Eso era lo que quería lindura- Dijo sorprendido mirando mis ojos fijamente -Ya estas aprendiendo - Me paso su teléfono donde mi rostro se reflejaba y mis ojos estaban de un color sangre. Me asuste así que tire el teléfono.

Crees que es barato niña- Grito cogiendo el teléfono del suelo.

-¿Que me pasa?- Dije muy confundida y asustada

-Eso intente mostrarte ayer lindura, sigue conmigo y te mostrare que puedes hacer- Dijo con un gesto pícaro en su rostro yo asentí con la cabeza y tomo mi mano con mas delicadeza que antes.